Como ya sabemos desafortunadamente, los crímenes existen hoy en día en cualquier parte del mundo, aunque en algunos países más que en otros siguen estando presentes y hay que prestarles la atención que se merecen. Cualquier persona que trabajé con la ley sabe que son innumerables los casos que se registran a diario sobre cualquier tipo de delito.
Algunos de estos delitos son leves y fáciles de llevar, a diferencia de otros como el homicidio de tentativa que, aunque no exista crimen como tal puesto que el objetivo es matar y al final no logra llevarse a cabo. El criminal, aunque no lo haya conseguido ha cometido un crimen y conlleva unas sanciones a ojos de la ley.
Todo lo que hay que saber sobre el homicidio en grado de tentativa.
En primer lugar, vamos a explicarte en que consiste este tipo de homicidio y sus particularidades. Se considera homicidio en grado de tentativa a todo aquel delito en el que el autor intenta matar a una persona, pero no lo consigue por causas ajenas a su voluntad. Es importante tener en cuenta que la intención del autor tiene que ser la intención de terminar con la vida de la persona y que la intención en sí ya representa el crimen, aunque no se consiga la muerte.
Es importante saber diferenciar entre el homicidio en grado de tentativa y el delito de lesiones, el primero solo se cumple si el objetivo principal es la muerte de la persona, mientras que en el segundo el único objetivo es causar daño o lesiones. Por otro lado, hay que destacar que no es necesario lesionar a la persona para intentar cometer el homicidio, aunque lo común es que la víctima se encuentre con algún daño debido al ataque no es imprescindible.
La tentativa aparece cuando una persona ya comenzó a ejecutar la conducta delictiva, pero, por un motivo externo, no logra completarla. El sujeto actúa con dolo ya que dispone de la voluntad para ejecutar el acto, pero no puede consumar la acción sólo por la irrupción de una circunstancia que es ajena a él. Podríamos considerar que hace referencia a un término que se conoce como delito imperfecto.
Lo que puede determinar que nos encontremos ante el homicidio en grado tentativa es que se produzca el objetivo, lo que quiere decir la muerte de la víctima. Por lo que si la persona fallece estamos ante el delito consumado. Si no es el caso, será una tentativa.
Hay una situación en particular que puede atenuar la pena en este tipo de homicidios. En caso de que se produzca desistimiento, es decir, cuando el autor del delito de forma voluntaria ha interrumpido los actos de ejecución, el que desiste del delito puede llegar incluso a una exención de pena. De totas maneras, sí que se castigarán todos los actos relacionados que puedan constituir un delito, como puede ser la tenencia de arma sin licencia, el allanamiento o cualquier otra posibilidad de sanción.
Es imprescindible en este caso demostrar que el objetivo era el homicidio porque, de lo contrario, se podría considerar un delito de lesiones con una sentencia mucho más leve y con finalidades distintas, sin subsanar las consecuencias para las partes implicadas.
Agravantes
Los agravantes que se pueden vincular a un homicidio en grado de tentativa son los mismos que los de un homicidio consumado. La alevosía, el ensañamiento o incluso el precio recompensa se descartan, porque convertirían el homicidio en asesinato. A pesar de ello, sí que se tienen en cuenta los siguientes factores:
- Que la motivación sea racista o discriminatoria por religión, ideología, etnia, raza, orientación sexual, género, enfermedad o discapacidad.
- Reincidencia.
- Parentesco con la víctima.
- Disfraz, abuso de superioridad o aprovechar las circunstancias de lugar tiempo o auxilio de personas.
- Abuso de confianza.
- Abuso de cargo público del culpable.
En estos casos, el homicidio en grado de tentativa pasa a ser sancionado con una pena en su mitad superior. La estancia en prisión puede ser mucho mayor en función de los agravantes que se cumplan en el crimen.
Penas
Para poder entender de manera correcta la pena de un homicidio en grado de tentativa tenemos que tener en conocimiento cual es la pena que tiene el homicidio consumado que usamos como referencia.
El delito de homicidio está castigado con la pena de prisión de 10 a 15 años, aunque puede ir a más en algunas circunstancias particulares. Por lo tanto, en el caso de ser considerado homicidio en grado de tentativa, se puede imponer una pena inferior en uno o dos grados a la legalmente establecida en el homicidio consumado.
¿Qué significa esto? Significa que al tener en cuenta un homicidio normal, con pena de entre 10 y 15 años, si se rebaja un solo grado, la pena se reduce a entre 5 y 10 años de cárcel. Si se rebaja dos grados, pasa a ser de dos años y medio a cinco años.
La diferencia es considerable, y a eso hay que sumar también los agravantes antes citados. En caso de cumplir suficientes agravantes como para tratarse de la pena máxima, 22 años y medio, si se considera en grado de tentativa hablamos de una pena máxima de 15 años al bajar un grado o de 7 años y medio en caso de rebajar dos grados.
Ahora que ya sabes todo sobre el homicidio en grado tentativa. Es fundamental saber que las penas son variables debido a sus agravantes no son las mismas para todos. Se tiene en cuenta que es un concepto difícil de entender e identificar en un tribunal, pero con una buena investigación todo es posible.
Esperamos haber resuelto tus dudas con este artículo sobre el homicidio en grado de tentativa si tienes cualquier consulta no dudes en ponerte en contacto con Audacia Abogados.
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